En el minuto 92 me acerqué a Preferencia para manifestar, como muchos aficionados, mi disconformidad con la actuación del Consejo de Administración del Albacete Balompié. Pañuelo en mano y gritos de Panadero dimisión amén del gesto de la mano en la cara.
Al ver la sonrisa de Ubaldo, la mirada desafiante de Pedro Lomo y los gestos de Gregorio hacia un sector de los que allí nos reuníamos, tuve un gesto muy feo y reprochable con el dedo. No tiene justificación así que sólo me queda pedir disculpas. Avergonzado de mí mismo estoy por ese comportamiento soez e impropio.
Los directivos marcharon escaleras abajo y en el pasillo quedó un grupo de aficionados. Protestas y gritos de oposición ante la hipotética destitución de Juan Ignacio Martínez. A los cinco minutos nos marchamos a petición de los miembros de seguridad privada del Carlos Belmonte.
Decidí aguardar en los exteriores, concretamente en la bocana de acceso a la sala de prensa. No estaba solo puesto que también esperaban 5 ó 6 miembros de la peña Curva Rommel. Tras el desfile de la plantilla, aparece el consejero Gómez Rebenaque. Le pedí que se marcharan si todavía les quedaba algo de vergüenza.
Carlos se acercó a mí y me comentó que lo que necesitan son propuestas: "Si tienes alguna, plantéala, o sube tú al palco". Y mi respuesta fue contundente: "Primera propuesta: Dejad que la prensa haga su trabajo. Bastantes problemas tiene el club como para ir buscando". Posteriormente tratamos el tema económico donde nuestros puntos de vista eran contrapuestos. Se acercó Gregorio y terminamos la conversación. El trato de Rebenaque fue correcto.
El embrollo llega cuando unos minutos más tarde se presentan Panadero, Luis María Y Pedro Lomo. Le dije al vicepresidente deportivo: "Panadero, vete". Gonzalo esbozó una sonrisa y Luis María intentó dirigirse hacia mí pero saltó el guardaespaldas del vicepresidente económico: "Imparcial, ¿de qué vas? Imparcial, ¿de qué vas? Ya te conocemos".
Después continuó: "Eres un cobarde, eres un cobarde. ¡Dilo en la tele! ¿Qué haces en la tele? Aprende a hablar"...
Entre tanto los miembros de Curva Rommel les reprocharon sus mentiras sobre los pagos y les pedían su marcha argumentando que nadie los quiere en Albacete. Luis María se puso en plan chulo y yo recordé las hazañas de su padre (otra vez metiendo la pata ). En ese momento aparece Josema Moreno para hacer unas instantáneas. El fotógrafo de Gente tuvo que aguantar las impertinencias de un miembro de seguridad mientras retrataba a Gonzalo Panadero. ¡En la calle también quieren mandar!
En fin, esta es la historia. Tampoco pretendo ser un mártir; yo tuve dos salidas de tono intolerables y estúpidas. Simplemente me sorprendió la actitud barriobajera de un directivo al que estimaba hasta ayer.