Ayer fue un día muy bonito para todo el que sea seguidor del Albacete. En primer lugar, el recibimiento que se hizo a los jugadores fue fantástico, todos unidos y concentrados en conseguir el objetivo, emocionante.
Después, un partido de fútbol intensísimo que comenzó con el estadio rugiendo con nuestro himno y todos los demás cánticos. A continuación, vaivén de sentimientos: alegría, tensión, éxtasis, inquietud, tristeza... pero sobretodo ORGULLO, el orgullo de ver a nuestros jugadores dar el 100% durante los 90 minutos y quedarnos con la sensación de estar por muy poco fuera de la final de Playoff. Nada que reprochar.
Pero sin duda lo más bello se dio cuando el árbitro pitó el final del encuentro y toda la afición junta quiso reconocer el esfuerzo de los nuestros tras esta maravillosa temporada e intentar darles los ánimos que sin duda merecen. Hace muchísimo tiempo que no disfrutábamos del Alba como lo hemos hecho este año, el ambiente desde el inicio fue bueno y optimista y, con el avance de la temporada, mucha más gente se fue sumando a la locura por el Alba.
Para finalizar, dar gracias a todos los jugadores, del primero al último pues en mayor o menor medida han luchado para llegar hasta aquí y también a todo el cuerpo técnico y directiva porque han sido unos grandes profesionales en el área deportiva, social y económica. Por mi parte deseando que llegue ya la pretemporada!