El otro día supe que uno de los expulsados de este foro había aparecido muerto en su bañera, con las muñecas desolladas y nadando en sangre. Según el forense, presentaba además algunas mordeduras de gravedad en los glúteos y en el cuello, y había fallecido desangrado. A día de hoy se desconoce a qué tipo de animal corresponden las mordeduras, pero se supone que a un mamífero de unos cien kilos y gran envergadura.
Tras una charla con su familia, se me permitió leer una carta que se encontró sobre la mesa de su dormitorio, al parecer son sus últimas palabras. Pedí permiso para copiarla, y os la reproduzco aquí, tal y como yo la vi.
Tiene la garra afilada del león
que circunda la sabana guardando
el caos en sus fronteras
va por el foro tras de la hiena,
suena en el viento como una bala
y zas
BelmonteWatch
desenvaina y derrama
advertencias rojas como
avisos de muerte dolorida
a mí me da miedo,
yo sueño que en la sombra me observa
con sus prismáticos escudriña
hasta el último pedazo de mis entrañas
tiene los pasos suaves del asesino
que en la esquina más oscura del callejón
te espera con una daga de sombras te espera
y zas
BelmonteWatch
te asesta puñaladas de frente
sin que apenas le tiemble la mano
ni le mude la cara te deja congelado
ten cuidado, forero, con tus palabras
mide bien tu temperamento,
enfría tus sienes y respira con calma
antes de enfrentarte a la bestia,
te aseguro amigo que no querrás
encontrártela en tu hilo,
respirando a tus espaldas,
cuando zas
BelmonteWatch
te haga su presa
reza lo que sepas, amigo,
reza lo que sepas.