La FIFA decidió al fin sobre el cabezazo que Zinedine Zidane propinó al italiano Materazzi durante la final del Mundial de Alemania. El organismo futbolístico castigó al francés con tres partidos de sanción y 7.500 francos suizos (4.775 euros). El italiano también fue castigado: dos partidos y 5.000 francos suizos (3.183 euros).
Tras escuchar a Zidane hoy y a Materazzi, el pasado 14 de julio, el comité disciplinario de la Federación Internacional determinó que "no hubo insultos racistas".
Fuente: El Mundo