Tengo muy claro que nos han estado engañando desde el mismo día del traspaso. Tampoco soy un experto en temas de traspaso de jugadores, pero si nadie me rebate, esto es lo que tengo claro: enfocaremos el tema desde tres ángulos: derechos sobre el jugador (lo llamaremos propiedad del jugador) ; derechos de intermediación (derechos del agente); y ingresos diferidos (cláusula de internacionalidad y futuro traspaso).
1. Propiedad del jugador: Según las cifras oficiales, era al 50/50 Albacete-Camaño. Se traspasa al jugador en julio del 2004. El Alba recibe 1.8 millones de euros; el Alba, según la noticia que pone JuanLUX más arriba, a partir de ese momento no participa en modo alguno en la propiedad del jugador.
2. Derechos del agente: Camaño, en calidad de agente, cobra su comisión correspondiente sobre el montante total del traspaso. La dirección deportiva del Albacete hace otro tanto, en virtud del contrato con incentivos que tenía firmado el club con los señores López Alfaro y Resta.
3. Ingresos diferidos:
- Ingresos derivados de la celebración de un partido amistoso (hablamos de julio de 2004)
- Cesión de al menos dos jugadores.
-300.000 euros en caso de que Pablo fuera internacional en tres ocasiones (posteriormente se conocería que tenía que tratarse de ser internacional titular en tres partidos de competición). Por cierto, todos los partidos que disputa la selección española tienen la consideración de oficiales, es decir, cuentan para los ranking FIFA y UEFA. Para simplificar, en cuanto se ponen la camiseta con el escudo y suena el himno.
-20% de la plusvalía que generara un posible traspaso futuro de Pablo.
Esto son las cifras oficiales. Ahora van dos hipótesis:
1. El Alba valora su 50% de propiedad en 1.8 millones de euros, pero sólo recibe del Atleti el 80% (1,44 millones)en un pagaré, y retiene el 20% de la propiedad, que queda de la sigueinte manera: 50% Camaño, 30% Atleti y 20% Alba. Camaño no recibe un duro del Atleti, pero conserva la propiedad del jugador, aunque se compromete a que juegue en el equipo rojiblanco. Por eso el Atleti le autoriza a negociar con otro club por debajo de la cláusula de rescisión (affaire Juan Palacios). Cuando el Alba no tiene ni para pagar la luz, a finales de temporada, acuciado por la falta de liquidez, acude a Camaño, quien le paga 1,2 millones por el 20% que todavía conservaba el Alba. Camaño sabía ya que en el mercado, ese 20% valdría bastante más, además de reforzar su posición frente al Atleti. Camaño se la juega al Atleti, y, en consecuencia, tiene que hacer juegos malabares para recuperar la confianza de Cerezo. Echa a los pies de los caballos a su jugador; el atleti le prohibe la entrada a las oficinas del Calderón, y aparta a uno de sus representados (Ibagaza) del equipo.
2. El Alba vende por 1,8 y negocia la expectativa de la plusvalía. Obtiene un 20% del aumento de valor del jugador en un posible traspaso. A finales de esta temporada, Camaño le propone lo siguiente: repartir la plusvalía que ve cercana, puesto que tiene avanzadas negociaciones con un club inglés para un traspaso millonario. Da 1,2 millones al Alba y le deja el 50% de la opción anterior (el 10% de la plusvalía, una vez descontadas todas las cantidades cobradas como consecuencia del traspaso (cláusula de internacionalidad, valor del partido amistoso, etc...). Con lo cual Camaño tiene mayor margen de negociación con el club inglés, y aumenta sustancialmente su margen de beneficio.
Hay una tercera hipótesis, puede que más cercana a la realidad y es la que formula Sito anteriormente.: Tanto pa tí y tanto pa mí, y al Alba que le den por culo.