Entrevista a Ferrando, ¿con mensaje subliminal para Pacheco?
«El Alavés siempre quiere jugar bien al fútbol y se preocupa por tocar el balón»
Critica la idea de que «los equipos que bajan tienen que subir de carrera» y afirma que «jugaremos con respeto ante una de las mejores plantillas»
FERRANDO hace indicaciones en un partido de esta temporada.
«Pacheco sabrá por qué no jugó en Vitoria»
César Ferrando regresó la campaña pasada al club en el que se dio a conocer, con el que consiguió el ascenso a Primera en la temporada 2002-03. Un reto, el de volver a Primera, del que prefiere no hablar a pesar de su buen inicio. «Todavía es muy pronto», afirma. El técnico valenciano del Albacete destila optimismo y amabilidad. Lo único que pide es que le dejen trabajar y en cuanto al Alavés sólo tiene palabras de alabanza. «Es uno de los equipos con mejor plantilla y vamos a tenerle el respeto que se merece».
-¿Cómo están los suyos después de perder por primera vez en casa?
-Los primeros días de la semana, el equipo estaba bastante mal, algo lógico porque no merecimos perder con el Hércules, pero ya está olvidado. Tengo la suerte de contar con un buen grupo, muy trabajador y en estos momentos preparado para intentar ganar en Vitoria.
-A pesar de la derrota no pueden quejarse, han hecho un buen comienzo de curso.
-Quizás por eso te comes un poco más la cabeza, porque lo estamos haciendo bien y por mala suerte perdimos ante nuestra afición. El equipo dio la cara y lo único que hay que hacer es seguir trabajando. Estamos en el camino y hay que continuar centrados. Son derrotas que te duelen, pero como el equipo está bien, hace que duelan menos.
-Su inicio tan prometedor ha levantado muchas expectativas. ¿Piensan en el ascenso?
-Cuando empiezas bien siempre se crea ilusión entre la afición, alimentada muchas veces por los medios de comunicación. Pero nosotros somos un club que tiene el duodécimo o decimotercero presupuesto de la categoría. Eso está ahí y hay que tenerlo en cuenta. Sin embargo, hay que ser realistas y no hay que negar que hemos empezado bien. Peleamos todos los partidos pero hay equipos como Alavés, Murcia, Hércules, Almería o Xerez que están por delante nuestro tanto en presupuesto como en potencial.
-¿Pero aspiran a algo más que la permanencia?
-Claro que sí, como todos los que estamos en Segunda, e ilusión no nos falta. Con sinceridad digo que es muy pronto, que todavía no hemos hecho nada. Lo que hemos hecho ha sido empezar bien y esto lo único que te da es que te dejen trabajar. El año pasado tuvimos muchas más dificultades.
Obligación de subir
-¿No le dejaron trabajar?
-Los buenos resultados aportan tranquilidad y no sólo en la plantilla, también en el entorno. El problema nuestro era el que puede tener ahora el Alavés. Los equipos que han bajado parece que tienen que subir de carrera y esta competición es muy complicada. Cuando no empiezas a ganar partidos surgen los comentarios de siempre: 'si no es normal', 'que tienes que subir', 'si hay dudas'... Al final se crea mal ambiente y te pasa factura. Es así de simple y fue lo que nos ocurrió el año pasado. Éste estamos tranquilos y lo primero es hacer 50 puntos para salvar la categoría, pero sin dejar de pensar o soñar que puede sonar la flauta y estar arriba.
-De cara al choque con el Alavés cuenta con muchas bajas en la delantera.
-Salvando a Parri, que es un jugador determinante con sus golpeos porque es capaz de hacer goles de falta, somos un equipo igualado en todos los aspectos. Espero que no se noten las bajas aunque es verdad que nos hemos quedado con Azkorra y César Díaz, además de Cortés, que puede ayudar ahí. Tenemos mucho trabajo y poca pólvora, pero hay que afrontar las cosas como vienen.
-Unas ausencias inoportunas sobre todo porque en los dos últimos partidos no han visto portería.
-He hablado con los jugadores y les he dicho que hacer goles no es sólo una tarea de los delanteros. A la hora de fender decimos que todos tenemos que trabajar y pasa lo mismo en el ataque. Ahora no sólo hay que mirar a Azkorra o a Díaz, un chaval de 19 años. Si estamos mal en el remate, todos tenemos que apretar el culo.
-La temporada anterior el suyo fue el cuarto equipo con más tantos en contra. ¿Ha mejorado en este apartado?
-Si no hay defensa no hay ataque, lo que no quiere decir que vayas a meter once jugadores a defender. El sentido común del fútbol dice que lo primero que hay que hacer es montar la defensa y en eso trabajamos. Hasta el momento, nos han metido once y tenemos que minimizar lo máximo posible el daño que hacen los rivales.
-¿Qué referencias tiene del Alavés?
-Le he visto bastante porque en su plantilla tengo un buen amigo como Jandro. Al margen de ex jugador mío le considero un amigo. Estoy pendiente de cómo le va, hablo regularmente con él y cuando se lesionó, también charlé con él.
Respeto al rival
-¿Y qué le cuenta?
-Pocas cosas en cuanto a fútbol porque él defiende otros intereses. Pero ahora no vamos a descubrir al Alavés. Es un equipo que siempre quiere jugar bien al fútbol y que se preocupa por tocar el balón. Vi el partido del otro día en Salamanca y no es para 3-0, no mereció ese resultado. Siempre va a su ritmo. Algo tiene que tener cuando todavía no ha perdido en casa y el jueves eliminó al Celta. Vamos a tener el respeto que se merece porque lo tiene.
-¿Le gustaría contar con la plantilla del Alavés?
-Estoy muy contento con la que tengo, pero a todo entrenador le gustaría contar con jugadores de la calidad de los del Alavés, muchos de ellos con una larga experiencia en Primera. Con el Hércules, el Murcia y el Almería, es uno de los equipos con mejor plantilla y con bastante diferencia respecto a los demás de la categoría.
-¿La entidad de la que habla le va a hacer variar sus esquemas en Mendizorroza?
-Jugaremos como siempre. Intentaremos ser nosotros mismos con el máximo respeto de saber a dónde vamos y a quién nos enfrentamos en este caso. Si somos capaces de ser lo que somos en un campo complicado, ya tenemos algo ganado.
-¿Espera un Alavés dolido por las dos últimas derrotas?
-Estará herido, pero la victoria sobre el Celta les hará estar moralmente más fuertes