Los flojos resultados del equipo grana han enrarecido el ambiente en el vestuario del Murcia
La floja temporada del Real Murcia ha hecho que desaparezca la unión que había entre los jugadores y ayer, Acciari y Pablo Sierra se encararon en el entrenamiento
La recta final de la competición no va a ser fácil para un Real Murcia sin objetivos en el que cada miembro de la plantilla comienza a mirar para su lado. El ambiente que se vive en el vestuario ya no es de unión y los malos resultados han enrarecido el ambiente entre los futbolistas.
Ayer, en el entrenamiento de Molina, José Luis Acciari y Pablo Sierra se encararon tras una dura entrada del argentino. El enfrentamiento no llegó a más ya que varios compañeros se interpusieron entre ambos, pero este hecho deja bien claro el mal momento que se vive dentro del vestuario, a la espera de que finalice una temporada en la que vuelven a estar descartados para el ascenso cuando aún faltan trece partidos para el final.
El roce entre Acciari y Pablo Sierra fue el más escandaloso, pero no el único. Otras acciones demasiado fuertes marcaron un entrenamiento muy tenso.
David Palacios se llevó una gran bronca de Sergio Kresic por entrar con demasiada contundencia a Pedro León, pero las entradas posteriores de Acciari a Sierra y a Palacios no fueron merecedoras, a juicio del entrenador, de reprimenda alguna, lo que no ha sido visto con buenos ojos por una gran parte de la plantilla.
En el vestuario hay una opinión bastante generalizada sobre el trato preferencial que reciben algunos futbolistas por parte de Kresic, que hace unos días expresó públicamente su contento con el trabajo que esta realizando José Luis Acciari a pesar de que no atraviesa por un buen momento y su aportación al equipo grana no está siendo lo importante que cabe esperar de él.
La situación por la que pasa el vestuario grana no es nueva ni única. Los enfrentamientos y roces entre futbolistas son muy habituales en todos los equipos, sobre todo cuando las cosas en el plano deportivo no van como se esperaban.
Además, una vez que el equipo se ha quedado sin objetivos, Kresic vive una situación complicada ya que no es fácil su labor de intentar motivar a unos futbolistas que comenzaron luchando por el ascenso a Primera, estuvieron en el liderato de la tabla, y que han protagonizado una caída en picado hasta ver el ascenso prácticamente imposible.
El desarrollo de la actual temporada ha sido uno de los motivos por los que dentro del vestuario el ambiente no es todo lo bueno que debería ser. Las luchas internas que ha vivido el club, la imposición de algunos futbolistas por parte de Mario Husillos, las críticas sobre el argentino y su marcha, para la mayoría demasiado tardía, han dividido a la plantilla, que vive sus horas bajas a la espera de que finalice una mala temporada y comience la próxima.
Las bajas
Sergio Kresic seguirá teniendo problemas esta semana para elegir delantero. Iván Alonso, con fractura del tabique nasal, seguirá de baja por tercera jornada consecutiva. Su intención es recuperarse para el domingo de la semana que viene. Además, el técnico tiene la duda del portero Chalkias y de Salgueiro, quienes apuran su recuperación para viajar a Albacete.
Hoy, a Campoamor
El Real Murcia sigue su periplo por los campos de otros municipios a la espera de que el césped de Cobatillas mejore. Ayer el equipo entrenó en Molina y esta mañana lo hará en Campoamor. Jueves y viernes Kresic volverá con su plantilla a Cobatillas. El sábado hay partido en Albacete, 18.30 horas, por Telemadrid y por la autonómica de Castilla-La Mancha.